¿Te has preguntado alguna vez cómo las tiendas rastrean cuándo se quedan sin ropa? Con tantos estilos diferentes de camisas, chaquetas y pantalones en la tienda, puede ser un desafío identificarlos a todos. Entonces, ¿cómo lo hacen? Las tiendas tienen varias formas de realizar el seguimiento de todo, una de ellas son las etiquetas RFID. RFID, o Identificación por Radiofrecuencia. Estas etiquetas contienen un chip microscópico interno que se comunica con una máquina mediante ondas de radio. Es como un código que solo las máquinas entienden. En este artículo, cubriremos todo sobre las etiquetas RFID para ropa, cómo funcionan y cómo ayudan a las tiendas a reducir la pérdida de ropa.
Una etiqueta de ropa RFID es una pequeña etiqueta utilizada para adjuntar a una prenda de vestir. Tiene un microchip y una antena. Una máquina especial que emite ondas de radio puede comunicarse con esta antena. Cuando la etiqueta entra en el rango de la máquina, envía su propia señal única (con su código único). Esto significa que le informa al sistema qué etiqueta está en el artículo. Estas etiquetas son lo suficientemente pequeñas como para permitir que se puedan adjuntar a casi cualquier tipo de ropa sin ser detectadas.
Gestión de inventario: Se refiere a administrar las prendas de vestir que tiene una tienda. Este es un trabajo muy importante porque las tiendas deben llevar un registro del número de artículos en existencia y saber cuándo ordenar más. Si una tienda se queda sin los artículos más populares, los clientes pueden buscar estos productos en otro lugar. Las etiquetas RFID facilitan mucho esta tarea. Permiten a las tiendas identificar qué ropa se vende rápidamente y necesita ser reabastecida pronto. Por ejemplo, si una camisa en particular se vende muy bien, la tienda puede detectarlo fácilmente mediante las etiquetas RFID y ordenar más stock inmediatamente. También pueden ver qué ropa no se está vendiendo bien. Si ciertos productos no tienen buena salida, la tienda puede retirarlos de sus estanterías para hacer espacio para productos que se venden mejor.
Las etiquetas RFID también son muy útiles para hacer un seguimiento de la ropa desde su creación hasta cuando se vende en la tienda. Una prenda de vestir viene con una etiqueta RFID adjunta tan pronto como es fabricada. Esto permite que todos en la cadena sepan dónde están las prendas en producción. Los minoristas pueden hacer un seguimiento de cuánto lleva la ropa en producción, junto con cuándo llegará a la tienda. El RFID también puede ser utilizado por las tiendas para hacer un seguimiento de cómo la ropa es entregada de los fabricantes a las tiendas. Eso ayuda a mantener todo seguro y también asegura que la ropa llegue a tiempo a los lugares correctos. Además, este seguimiento también permite que las tiendas optimicen sus entregas, asegurando que los productos siempre lleguen frescos y a tiempo a los clientes.
Para las empresas que venden productos, mantener una cadena de suministro segura es crucial. Para combatir esto, las Etiquetas RFID son extremadamente útiles a la hora de asegurar la cadena de suministro y reducir drásticamente el riesgo de que se pierdan o roben mercancías. Las etiquetas NFC o RFID contienen códigos únicos que están vinculados a un artículo. Esto significa que se puede realizar un seguimiento de cada prenda de ropa desde el fabricante hasta la tienda. Así que, si algo se extravía, puedes rastrear hasta donde fue escaneado por última vez. Eso ayuda a las tiendas a determinar qué sucedió con sus artículos y a prevenir robos. El uso de etiquetas RFID proporciona seguridad a las tiendas sobre su inventario, reduciendo cualquier posibilidad de pérdidas de productos.
De hecho, está cambiando las tiendas y las compras para los clientes también se están volviendo más fáciles con sistemas de etiquetado RFID automatizados. Cuando las prendas llegan a la tienda, estos sistemas pueden etiquetarlas automáticamente. De esta manera, el inventario siempre es preciso y actualizado. El propio RFID ayuda a las tiendas a localizar productos rápidamente. Cuando los compradores tienen una necesidad específica, el personal puede usar dispositivos especiales para encontrar lo que necesitan sin tener que recorrer toda la tienda. Esto se traduce en menos tiempo esperando y más tiempo disfrutando de su experiencia de compra. La tecnología RFID también facilita los pagos, lo que a su vez ayuda a reducir las colas y hacer felices a los clientes. Los clientes se van sintiéndose satisfechos y es probable que vuelvan cuando pueden pagar más rápido.